miércoles, junio 17, 2009

Jetón

Mis nuevos jefes son españoles. Viene Fulano de Tal, que es como el capo de sistemas en España. Hablamos mucho de laburo: pide cosas y obtiene respuestas al toque. Se afloja, intercambiamos opiniones, siempre hablamos de sistemas, todo el día. Incluso se desayuna de algunas cosas que no tenía tan claras. Al parecer el tipo está bastante conforme en ese punto, así que se larga a hablar de otros temas. Hablamos de los países, hablamos de su primera visita a la Argentina. Me dice:

- Me ha sorprendido que en barrios bonitos las aceras estén tan deterioradas, por ejemplo.
(¿Dijo “barrios”? No estoy seguro, pero la idea era esa).
Le digo que sí, que es una pena. Acepto que somos medio descuidados. Me habla de las mujeres argentinas. Coincidencia total. No es ningún boludo el gallego. Pasamos a la política.

Me dice que allá básicamente hay dos partidos: izquierdas y derechas. Y un grupo de partidos menores que acaban apoyando a unos o a otros. Pero hay alternancias, y la derecha favorece a los obreros y la izquierda a los empresarios si cuadra, si es necesario, si viene al caso, si es bueno para el país.
Me dice que hay reelección por otro período y basta: 8 años máximo. Me cae bien el Manolo, pero hay un tonito, una cierta suficiencia…

Me cuenta otras cosas. Que el periodismo funciona bastante bien, que responden a intereses económicos, pero que al final ningún chanchullo se tapa por mucho tiempo: hasta por intereses económicos es mejor no apoyar a los demasiado corruptos.

Que los del sur de España son más de la joda, por el clima. Pero que ellos, los catalanes, se la pasan laburando como locos, y bien contentos.
Son como las nueve de la noche. A esta altura ya me duele un poco la cabeza.

Hablamos de los inmigrantes, especialmente de los argentinos. Me dice cosas que seguramente son ciertas, porque somos bastante así como me cuenta Fulano de Catalunya. Nos reímos bastante, él se afloja más, tanto como para intentar el famoso chiste:
- ¿Sabes cuál es el gran negocio con los argentinos?

Le digo que sí, que lo conozco. No quiero que me lo cuente, son como las nueve y media y estoy cansado. Se me mezclan las veredas (las “aceras”) descuidadas, los políticos nacionales de mierda, las leyes españolas de extranjería y el chiste del ego grande, y cometo el peor fallido para cometer con alguien que probablemente sea tu futuro supervisor: hago el chiste inverso que me han contado hace poco.

Le digo:
- Pero ahora hay otro chiste circulando por España, ¿no?
- No lo sé – duda Manolo, pero se predispone a divertirse -..., ¿Cuál?
- Uno que dice: “Nunca contrates a un argentino, porque en seis meses será tu jefe”…

Se ríe, pero al rato da por terminada la reunión un poco abruptamente, y yo me voy pensando en ser un poco menos jetón en la reunion de mañana: tengo la cabeza como el bombo del Tula un 17 de octubre…algo bien argentino, digamos.

9 comentarios:

DudaDesnuda dijo...

¿Los Clasificados de Clarín siguen existiendo???

Besos y búsquedas

El Profe dijo...

Desde una perspectiva difícil de adoptar, porque implica ser extremadamente honesto con uno mismo, ningún grado de suficiencia o "cancherismo" es justificable; ni siquiera aquel que supuestamente debiera levantar nuestra "autoestima" cuando los reveses nos golpean; en este último caso, porque sólo queda en "piadosas mentiras" con las que tratamos de consolarnos, en lugar de enfrentar la necesidad de corregir el verdadero problema. Si bien "ellos" pueden congratularse de un cierto nivel de convivencia y tolerancia, tanto como "nosotros" de nuestras riquezas y bellezas naturales, ninguno puede reclamar como mérito aquello que de gracia se ha recibido. Sería muy largo resolver los "por qué" así que sólo diremos como en la propaganda del juguito:"No nos lo merecemos".
Un abrazo.

El Dandy dijo...

La clave es saberse un par de chistes de loritos. Esos son bien verdes, sirven para toda ocasión y rara vez ofenden a las minorías.

Sergio Muzzio dijo...

Pero algo amainé, no se crean: de hecho, esto pasó la semana pasada y me aguanté de contarlo por la remotísima posibilidad de que lo leyera, y se acuerde.
Me fue bien, todos tranquilos.

G dijo...

Bueno, si te vale la opinión de otra "gallega": en este país la izquierda no existe (por lo menos en el parlamento) y, el único bien que buscan los políticos, es el de ellos mismos y sólo se suelen poner de acuerdo para subirse el sueldo.
Fulano con lo del partido de izquierdas se refería al llamado Partido Socialista Obrero Español (PSOE), pero, como bien decía Javier Krahe (un cantante de por acá, que no sé si conoce por allá), lo único que tiene de verdad es lo de "partido".
En fin, que no creo que tenga que ver con lo que te contó el tipo ese, pero ya sabes, tiene que haber de todo en todas partes.
Besos (que espero no te produzcan dolor de cabeza).

Sergio Muzzio dijo...

G, me deja mucho más tranquilo...

Daniela dijo...

Jaja,no fue muy feliz el chiste! pero si te sirve de consuelo te cuento dos cosas: 1) lograste despertar seguramente varias sonrisas, al menos a los lectores de este post. 2) hay gente, como por ejemplo mi marido, capaz de mandarse bloopers más grandes e irremediables como irse de viaje con su jefe argentino a ver a sus jefes españoles y aprovechar la estadía en madrid para hacer contactos profesionales, mejorar las relaciones con su jefe con vistas a una promoción o aumento de sueldo, quizás aprovechar el hotel gratarola para llevarse de acompañante a... su esposa?... una amante?... acaso un atractivo gato? ... No, el señor se lleva a su PAPA!!!
Firma: esposa resentida cuidando 3 crios.

Daniela dijo...

falta un detalle importante en mi comentario anterior: después de "jefes españoles", debe decir "y en lugar de" más lo que sigue. ahora se entiende?

Honestidad Brutal dijo...

Hubiese echado el chiste un poco más temprano y se hubiese ahorrado la habladuría del señor..

Pero, Cual es el gran negocio con los argentinos?

Como dice Daniela en el primer punto, me hiso sonreir el post!

Si lo despiden, siempre puede imprimir una segunda edición de su libro, y salir de vendedor ambulante! xD!