Esto puede verse como un regodeo morboso en la desgracia de las focas, o como imágenes impresionantes, crudas pero no exentas de belleza, de un animal poderoso como pocos.
Y conste que no las mata para sacarles la piel, Brigitte.
La cámara lenta permite percibir detalles que son muy impactantes; son tolerables por aquello del "ciclo natural" (¿Así le dicen?) por supuesto que la Bardot podría invitarles aun restaurante francés ¡ja!
En realidad lo que me parece fabuloso son los saltos, no la cacería en sí: calcule que si se engulle una foca de un bocado estamos hablando de un bicho muuuy grande. Se necesita una fuerza tremenda para hacer eso.
2 comentarios:
La cámara lenta permite percibir detalles que son muy impactantes; son tolerables por aquello del "ciclo natural" (¿Así le dicen?) por supuesto que la Bardot podría invitarles aun restaurante francés ¡ja!
En realidad lo que me parece fabuloso son los saltos, no la cacería en sí: calcule que si se engulle una foca de un bocado estamos hablando de un bicho muuuy grande. Se necesita una fuerza tremenda para hacer eso.
La Bardot en su época también, una bestia...
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