Resulta que andaba preparando la ropa para mandar al lavadero, y era una pila grande porque hacía como tres semanas que no llevaba nada. Había ropa en el piso de la habitación, sobre las sillas, en el baño, por todos lados. Como hago siempre, empecé a separarla según la simpatía que le tenga a la prenda, y así las camisas de laburo fueron amontonándose sin ninguna gracia y las camisas de salir fueron dobladas con amor y apiladas en grupos de no más de tres, y estacionadas a 45º al lado de los pantalones que cumplen el mismo propósito y que ostentan pequeñas etiquetas de papel que dicen “Cena con Fulana”, “Primer beso a Sultana”, etc.
Al doblar una bermuda con un papelito azul que decía “Paseo por el Tigre con Aníbal”, noté un bultito en el bolsillo derecho que resultó ser un billete de 5 pesos arrugado y unas monedas chicas y pegoteadas (recuerdo que Aníbal compró helados, y que ese día el sol derretía la brea de las calles). Desarrugué el billete y lo puse sobre la mesita de luz, y seguí ordenando. En el bolsillo de una camisa encontré 20 pesos y en un short 35 doláres.
Y así sucesivamente, fui armando una pila grandecita sobre la mesa de luz, porque encontré ropa debajo de la cama con etiquetas de la época del 1 a 1, “Praia Dos Ingleses” y esas cosas.
Australes, Patacones serie B, Reales, Pesos Uruguayos, Dólares y, debajo de la toallita de un slip que decía “Ruta Hotel con Katsumi”, 200 yenes.
Decidí buscar en la ropa limpia también, por supuesto.
Así llegué a juntar casi 700.000 pesos y estaba pensando en llamar a mis amigos para ir a festejarlo, cuando llegué al vaquero Wado’s que tenía la etiqueta roja de las malas salidas.
Estaba en lo más profundo del cajón de abajo del placard y decía simplemente “BB”. No recordaba a nadie que tuviera un nombre con esas iniciales, ni un lugar, y con Brigitte Bardot nunca salí, así que metí la mano confiado y saqué un papel amarillo con olor a farmacia.
Ahora voy a ver qué hago con la guita. Si me compro algo, o invito a mis amigos o la vuelvo a meter en la ropa y hago de cuenta que nunca revisé nada y que las cuentas están saldadas, porque no me alcanza todo lo que junté para deshacer la letra retorcida del ginecólogo que decía que todo había salido bien cuando justamente todo había salido tan mal y yo no podía ni mirarte a la cara cuando te dije que ya estaba y que tus padres jamás iban a enterarse.
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* Esto es un borrador, y adolece terriblemente de tener un (proyecto de) final que no tiene nada que ver con el desarrollo suelto y casi fantástico, un abrupto cambio de rumbo a partir de que escribí "bebé". Pero eso es lo que pasa cuando uno escribe al garete o anda revisando bolsillos como si fuera inocente.
15 comentarios:
me huele medio tristón el tema este, señor.
a la verdad que me empecé a entusiasmar con lo del dinero encontrado.
va a seguir?
¿a seguir buscando? la verdad es que estaba haciendo eso, acomodando la ropa para el lavadero, y encontré 35 mangos, en dos pantalones.
pero esta historia me parece que se queda acá, por lo menos por ahora.
Besos!
me encantó!!! y sí, hace rato admití que soy "la timidez y otras cosas adicta"!!
el final, excelente!
besoos
(marganto)
Es demasiado generosa con un borrador, Margot. Voy a pasarle un 0800 para las adicciones.
(muchas gracias!)
retome, retome, que por ahí le sale algo bueno.
buenas noches.
parece que voy a poder comentar...
nada, me gusto
besos
LA LUNA: Dale, lo retomo. Si prescribe a la tolerancia del blog (?), cuando lo termino te lo mando por mail. Muchas gracias!
FER: Ahora que lo decís, creo que en realidad es "Zutana", pero me amparo en eso de que es un borrador.
Con respecto a lo otro, no tengo en qué ampararme, che, pero uno sale con amigos, ¿o no?
PARENTESIS RELOADED! Bienvenida con su personalidad completa!!!
Besos!!!
Tantos recuerdos...
me mató, Muzzio.
La frase " Ya está" retumba sin cesar nuevamente cuando uno creía que el pasado había sido y que ya no era pero el presente insiste en anclarse y en agarrarse de las cosas quizá porque sabe de su débil entidad y quiere ser más de lo que es y que en realidad no es nada...
Perdone Muzzio, pero parece que también tengo tantas cosas en los pantalones...pero nunca me animo a revolver.
Mientras no se haga llamar Roberto, salga con todos los amigos que quiera.
CESAR: Anímese, pero desdoble solamente los billetes.
FER: Yo siempre me hago llamar Rúben, pero no sé por qué. Me parece que es nada más que para aclarar que se acentúa en la "U".
....para mi ese relato "que suena verídico"....es una incitación al manoseo, que al cruzarse con ud.la gente no hagan más que preparar tácticas para escabullirse en cuanto bolsillo tenga puesto,y ud. confunda con un "estoy matando"...jajaja
saludos
caracolita.com
caracolita: Disculpe...¿me lo explica de nuevo...?
Me pongo la camisa negra y a lo sargento gimenez le digo: "siga, siga"
Me gustó.
Besos
Bueno, si lo dice el sargento...
Será solo un borrador como dices, pero es ¡escalofriante!... tal vez porque una gran parte de nosotros tuvo que enfrentarse, con un nudo en la garganta y mariposas en el estómago, con esa terrible y definitiva disyuntiva ¡¿ahora qué hacemos?! tanta carga para , casi siempre, tan pocos años..."ya está, nadie más lo sabrá..tratemos de superarlo" ¡qué vana ilusión!
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